"El Ejercicio de la Caridad" de Bernard Préteseille

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II.- LAS MIRAS DE LA FUNDADORA

 

Marie Poussepin pertenece a un siglo en el cuál las obras de dedicación al prójimo, emanan de la caridad cristiana. Es la figura de Vicente de Paúl la que domina todas las creaciones de asistencia a las miserias (material o espiritual) del tiempo, para el que todo deriva de Jesucristo a quien hay que amar. Marie Poussepin vivió la caridad sobrenatural, esta caridad es el fin principal de su instituto.

Principales características de su obra

Las Escuelitas
 

El medio popular está menos provisto de educación que las clases pudientes. Durante la guerra de los Cien Años se había agravado con las guerras de religión la decadencia de las escuelitas parroquiales, donde fundaciones escolares habían sido usurpadas por particulares en provecho propio. El Concilio Trento siente preocupación por la causa escolar.

En Sainville la instrucción de las niñas estaba muy descuidada, esto abre un campo de acción para la promoción de la mujer en el apostolado. Se crean un número de congregaciones femeninas para esta enseñanza popular, por lo que Luis XIV se muestra favorable a estas iniciativas, ya que la política real intentaba hacer frente al protestantismo. Marie Poussepin comprende que el obstáculo es la pensión escolar, pero ella realiza la gratuidad completa de la enseñanza para todas. Ve necesario ofrecer a las niñas un trabajo que les permita ganarse la vida, por lo que añade una formación profesional “mostrándoles y enseñándoles a hacer medias y otras obras de seda y de lana, en tejido”

Servir a los pobres enfermos
 

Sainville sólo contaba con un barbero-cirujano para luchar contra las epidemias y las enfermedades. Luis XIV promulga un nuevo reglamento de los hospitales (1698), que distingue lo espiritual de lo temporal. Es el momento en que Marie Poussepin funda su comunidad, Sainville no cuenta con establecimientos hospitalarios, se implantan los cuidados a domicilio y los hospicios reorganizados iban a necesitar más la presencia de las hermanas de la Caridad para cuidar a los enfermos, dedicándose a ellos sin tener responsabilidades de gestión administrativa.

En las Reglas Generales dice a las hermanas que deben de hacer cuando estén con los enfermos: “Prestad servicio a los enfermos con testimonios de caridad y sin mostrar ningún disgusto. Tratad de ser más útiles si lo podéis, al bien de su alma que al cuidado de su cuerpo”.

Gratuidad y trabajo
 

Un claro ejemplo de gratuidad en Marie Poussepin está en que nunca impuso cuota escolar en la población. En las Cartas Patentes solicita al rey que se indique la prohibición de aceptar “ningún don ni legado, ni adquirir fondos”. La comunidad vivirá por el espíritu de pobreza y el amor al trabajo. 

Ni clausura ni votos públicos
 

Marie Poussepin excluye firmemente la clausura y los votos públicos, estando la comunidad comprometida en la práctica de los votos de obediencia, pobreza y castidad. Si funda una comunidad para ejercer las obras de la misión no puede encerrarla en la clausura.

Sainville, novedad dominicana

La voluntad en Marie Poussepin es fundar una comunidad de la tercera orden de Santo Domingo para la utilidad de la parroquia.

Característica que sobresale en Marie Poussepin
 
  • Trabajo-pobreza-misión. Para Marie Poussepin es esencial para el futuro de la comunidad el amor al trabajo para subsistir llevando una vida austera, vivida por una buena economía, el modo de vivir la misión (gratuidad).
Valoración personal
 

Marie Poussepin mira la fundación desde la perspectiva de que el trabajo en la pobreza para la misión van ligados para la prosperidad de la obra de la Providencia. Es el trabajo un medio de subsistencia para las hermanas, que deben vivir practicando la pobreza (es necesario una buena economía) para poder responder a la misión. “Renunciará a legados y fundaciones confiándose en la Providencia hasta creer que a sus hijas no les faltarán los socorros necesarios, mientras permanezcan fieles a sus reglas y asiduas al trabajo”. Apuesta para que sólo se tenga aquello que se ha conseguido desde el esfuerzo, desde renunciar para conseguir el bien común. Es una caridad vivida no de lo que sobra sino de lo que se puede conseguir por Amor a aquél que conforta. Es el amor profundo a Jesucristo el que hace llevar una vida cristiana encaminada al bien de los demás. Por ello, me ha llamado la atención el que M.Poussepin se reservaba para sí los enfermos más repugnantes, es la caridad que se dá y que pide a las que la sigan la que ella ya es capaz de vivir.